MIS ALIADOS

lunes, 19 de septiembre de 2011

Dulces despertares

Últimamente, me despierto de una manera demasiado relajada y no antes de las 10.


Despertar y puesta a punto
Tengo despertar de reina. Mi madre me levanta, me trae un colacao a la cama (Eso sí, con un par de pastillas para acompañar) y directamente al servicio, hago pis, me lavo la cara y me echo colonia fresquita del Mercadona (de color naranja, os la aconsejo).

Desayuno
Después de acicalarme, nos vamos al salón y me siento en mi trono, vamos, mi querido sofá relax, enciendo la tele y cojo mi sopa de letras, mientras mi madre me hace el desayuno: 2º vaso de colacao y una tostada de mantequilla con mermelada de fresa. Todo esto acompañado de las 7 pastillas de la mañana. 

Sola en casa
Una vez sola, mi madre se marcha a su negocio y me quedo en casa haciendo pasatiempos mientras oigo la tele de fondo

Sesión de peluquería y masajes
Sobre las 11 de la mañana, oigo que suena la puerta de entrada. Son mis tías Paqui y Mª Carmen. Mi tía Mari Carmen viene directamente a cortarme el pelo. Aunque una tenga cuatro pelos, hay que ponerse mona. Cuando terminas la sesión de pelu, viene lo mejor: masajitos en las piernas, de 11h a 13:30. Mi tía Paqui coge las felices cremas, se va hacia mis piernas y empieza a darme masajes. Eso es, sin duda, lo mejor de la mañana.

El almuerzo y la siesta
Ya con mis piernecitas relajadas, llegan los papis y la comida y más pastillas, claro. Al mediodía me tocan 3. Una guarrería pero es lo que hay. Llegadas las 3 y media de la tarde, me dejo caer en los brazos de Morfeo. Y al despertar....

Segundo dulce despertar
Me despierto con mi hermana diciendo "Rosaaaana, Rosaaaana, que es hora de levantarse" y vuelven los masajes. Cremita por los dedos de mis pies, masaje por la planta de los pies que sube por las piernas hasta las rodillas.

Ay! Ay! ¡Qué pronto se termina lo bonito!

Postdata: Todo esto tiene un inconveniente y es que apenas puedo andar. Ahora, me tienen que levantar y llevarme.  Si quiero salir a la calle necesito una silla de ruedas. Todo esto desde que entré la última vez al hospital.