MIS ALIADOS

domingo, 11 de diciembre de 2011

Artículo sobre Rosana en Diario Córdoba el 11/12/2011

Una luchadora que nunca se fue del todo

Aunque Rosana murió en octubre pasado, su blog contra el cáncer continúa sumando seguidores

MANUEL RUIZ DIAZ 11/12/2011

Cuando Rosana Nieto abrió su blog, ya llevaba año y medio luchando contra su enfermedad, un cáncer de pulmón que le fue diagnosticado poco después de casarse, como ella misma contaba en uno de sus primeros artículos. Porque en su blog, esta cordobesa de 34 años, vecina del Parque Cruz Conde, hablaba abiertamente de su lucha contra el cáncer. Una enfermedad que se la llevó para siempre el pasado 1 de octubre.
Sin embargo, el blog de Rosana,Diario de una luchadora , que ya sumaba numerosos seguidores, ha continuado recibiendo visitas y comentarios de aquellos que, bien la conocían personalmente, bien la conocieron a través de internet o del periódico, cuando su historia saltó a una de las contraportadas de Diario CORDOBA (27-06-2011).
"Sigo el blog de Rosana desde hace meses, nunca le escribí, aunque siempre estuve tentada --dice uno de los comentarios--. Pero hoy la pena me inunda, las lágrimas no dejan de caer de mis ojos y no puedo dejar pasar la oportunidad de al menos dejar un pensamiento hacia ella".
Aunque han pasado más de dos meses desde que Rosana se fue, su familia ha decidido, por ahora, mantener abierto el blog. "Al principio pensamos en dejarlo solo unas semanas para que quien quisiera dejase su último comentario, pero viendo que seguía teniendo visitas y mensajes, lo mantenemos", comenta Alberto, su hermano.
La relación entre los hermanos siempre fue muy estrecha. Por eso, no es exagerado decir que cuando Alberto da las gracias en el blog por los apoyos que recibió su hermana, es como si se escuchase a Rosana: "A Manuel que nunca le falló, a Toñi y Tono, que a diario la ayudaron --escribe Alberto--, a mis tías y familiares, a aquellos que la acompañaron en la vida real y también en la virtual". Alberto no se olvida de sus padres, "que ya han demostrado que se puede con todo, aunque el precio sea este gran sufrimiento".
Pero si Rosana leyese este reportaje, seguramente le gustaría encontrar el tono optimista que siempre intentó reflejar en su blog, donde, por ejemplo, contaba como, a pesar de su enfermedad, siempre intentaba disfrutar de los placeres cotidianos que le ofrecía la vida. "Cuando me voy poniendo buena --explicaba en el blog-- y me apetece salir a comer, siempre me gusta ir al mismo sitio y comer lo mismo: berenjenas a la miel. Es uno de mis platos favoritos y comiéndolas me siento genial".
Para muchos de quienes aún lo visitan, quizá el blog de Rosana sea como esas berenjenas con miel; un sitio en internet que transmite buenas sensaciones. Aunque ella ya no esté.

sábado, 12 de noviembre de 2011

Ha pasado más de un mes desde que te marchaste para siempre ...

Ha sido un tiempo extraño, un tiempo en el que aunque no lo parezca, te he echado mucho en falta. Un tiempo en el que siempre has estado en mi mente.

Ahora ya son más de dos meses desde que yo me marché. Aquello también fue un poco extraño para todos, pero sobre todo para mí. Irme tan lejos, sabiendo lo mal que te encontrabas; fue una decisión difícil, pero muchos sabían que tenía que hacerlo. Seguro que algunas personas no lo vieron del todo bien, otras que lo entendiesen que y otras que ni se lo plantearon; pero yo debía seguir mi camino, pero siempre te tuve presente.

Lo más importante de todo esto es que yo sabía que tú querías que lo hiciera, que continuase, y que me labrase mi futuro allá donde fuera; que viviera mil experiencias nuevas. Sabía que confiabas en mí, motivo suficiente para que no te defraudara.

Yo no quería que te fueras.

Concretamente ese día, horas antes de tu ida, compré los billetes para ir a verte por Navidad, pero tuve que hacerlo de nuevo por algo mucho peor.

Es duro tener que salir corriendo, desde tan lejos, por perder a una hermana.

Fueron veintiséis horas de espera, sabiendo que cuando llegase ya no me hablarías. Yo hubiera preferido despedirme de ti dándote un beso, agarrándote la mano; pero no pudo ser, yo no quería que te marcharas.

                Me dijeron que reías en esa mañana, que incluso preguntaste por mí y ya tan solo eso me calma. Te quedaste dormida, se acabó el sufrimiento y se terminó la batalla.

Hacía mucho que quería escribirte esto, pero no encontraba el momento de unas palabras, aquellas en las que decirte adiós; el adiós a mi hermana Rosana

Tan solo decirte que a pesar de todo me encuentro bien, estoy contento con mi nueva vida. Una etapa distinta pero exitosa; en lo académico, lo profesional y lo personal. Yo también necesitaba un pequeño descanso, aquel que disfruto y disfrutaba.

Quisiera terminar con una mención a las personas que siempre la rodearon.

Darle las gracias a todos aquellos que la apoyaron; a Manuel que nunca le falló, a Toñi y Tono  que a diario la ayudaron, a mis tías y cercanos que a diario la visitaron, a aquellos que la acompañaron en la vida real y también en la virtual.

Después de todo esto, la mención especial se la dedico a mis padres. Unos padres que ya han demostrado que se puede con todo, aunque el precio sea este gran sufrimiento. Aquellos que empiezan perdiendo hermanos, padres, sobrinos y hasta su propia hija; sin remedio.

Todo esto no tiene solución, solo queda afrontarlo y recordarlo. No hace falta decir que unos padres no deberían perder nunca a un hijo, pero esto ya ha pasado.

Desde aquí decirle a todos que los quiero, les mando un abrazo inmenso, y que en estos momentos la distancia no es nada.

Alberto

martes, 4 de octubre de 2011

Despedida a una gran luchadora, Rosana

El pasado sábado, 1 de octubre, la luchadora libró su última batalla. Pero esta vez fue diferente, esta vez perdió en su lucha contra el cáncer. Y digo ganó al cáncer porque ella sí ganó nuestros corazones.

Durante estos dos años que luchó contra su enfermedad, usó la sonrisa y el pensamiento positivo como sus mejores armas para tratar de vencer la lucha que comenzó el 2 de agosto de 2009.

Fue una hija, esposa, hermana y amiga generosa que nunca se quejó y siempre se esforzó para darnos su mejor cara. Cuando llegaban las malas noticias, los malos resultados médicos, ella nunca se vino abajo y, de esta forma, nos hacía olvidar que esta sería una historia sin final feliz. Toda una lección de coraje.

Conforme iban apareciendo los síntomas y los rastros de la evolución (mala) de su enfermedad: calvicie, hematomas, fatiga, Rosana nunca se sintió una víctima ni se sintió acomplejada. Supo reírse de ella misma. Rió, cantó, bailó y disfrutó cada día que la vida le regalaba.

Siempre vió todo de color rosa, como se podía leer en su última entrada "Dulces despertares" donde ya encamada y muy desmejorada, seguía ilusionada por su día a día.

Ya el sábado, no pudo más y se fue sin hacer ruido, sin hacernos sufrir su luz se apagó con un dulce sueño.

Todos los que habéis seguido su blog sabéis bien el coraje que demostró y la alegría que derrochaba a pesar de su situación. Desde aquí quiero agradecer todos el apoyo y el afecto que le habéis dado. Ella apreciaba mucho vuestros comentarios. Vuestras palabras le hacían muy feliz. Gracias a todos, de corazón.

Gracias también a su otra mitad, Manuel, por quererla tanto, a mis padres, a mi hermano, a mis tíos y primos, a mis amigos y sus amigos, a todos en general por estar ahí con ella.

Rosana, hoy celebra tu cumpleaños desde donde quiera que estés. Esta despedida es mi regalo. Te echaré de menos, mucho, mucho. Seguiré tus enseñanzas y viviré con alegría a pesar de la pena que tengo en el corazón. Hermana, te quiero.

lunes, 19 de septiembre de 2011

Dulces despertares

Últimamente, me despierto de una manera demasiado relajada y no antes de las 10.


Despertar y puesta a punto
Tengo despertar de reina. Mi madre me levanta, me trae un colacao a la cama (Eso sí, con un par de pastillas para acompañar) y directamente al servicio, hago pis, me lavo la cara y me echo colonia fresquita del Mercadona (de color naranja, os la aconsejo).

Desayuno
Después de acicalarme, nos vamos al salón y me siento en mi trono, vamos, mi querido sofá relax, enciendo la tele y cojo mi sopa de letras, mientras mi madre me hace el desayuno: 2º vaso de colacao y una tostada de mantequilla con mermelada de fresa. Todo esto acompañado de las 7 pastillas de la mañana. 

Sola en casa
Una vez sola, mi madre se marcha a su negocio y me quedo en casa haciendo pasatiempos mientras oigo la tele de fondo

Sesión de peluquería y masajes
Sobre las 11 de la mañana, oigo que suena la puerta de entrada. Son mis tías Paqui y Mª Carmen. Mi tía Mari Carmen viene directamente a cortarme el pelo. Aunque una tenga cuatro pelos, hay que ponerse mona. Cuando terminas la sesión de pelu, viene lo mejor: masajitos en las piernas, de 11h a 13:30. Mi tía Paqui coge las felices cremas, se va hacia mis piernas y empieza a darme masajes. Eso es, sin duda, lo mejor de la mañana.

El almuerzo y la siesta
Ya con mis piernecitas relajadas, llegan los papis y la comida y más pastillas, claro. Al mediodía me tocan 3. Una guarrería pero es lo que hay. Llegadas las 3 y media de la tarde, me dejo caer en los brazos de Morfeo. Y al despertar....

Segundo dulce despertar
Me despierto con mi hermana diciendo "Rosaaaana, Rosaaaana, que es hora de levantarse" y vuelven los masajes. Cremita por los dedos de mis pies, masaje por la planta de los pies que sube por las piernas hasta las rodillas.

Ay! Ay! ¡Qué pronto se termina lo bonito!

Postdata: Todo esto tiene un inconveniente y es que apenas puedo andar. Ahora, me tienen que levantar y llevarme.  Si quiero salir a la calle necesito una silla de ruedas. Todo esto desde que entré la última vez al hospital.